jueves, 25 de mayo de 2017

Visitamos Córdoba

Este martes 23 disfrutamos de un paseo por Córdoba. Salimos de la escuela y el transporte nos acercó hasta el primer destino de nuestro recorrido... ¡la Puerta de Almodóvar! Llenos de ilusión, sorpresa y comentarios como seño, se llama como el pueblo donde vivo... iniciamos el trayecto.


Aprendimos que recibe su nombre debido a que era el lugar donde arrancaba el camino que unía, antiguamente, Córdoba y Almodóvar del Río. Nos fascinó la muralla y lo útil que era para protegerse de los enemigos...

Continuamos con la visita a la Casa Andalusí, a donde llegamos tras recorrer las estrechas y laberínticas calles de nuestra ciudad. Conocimos a Salma, quien nos explicó los secretos de las antiguas residencias y la importancia central que tenían en ellas los elementos naturales: el agua, la vegetación y el cielo. También nos explicó cómo se pasó del manuscrito en papiro al papel, cómo se comenzó a fabricar este y de la inmensas bibliotecas que guardaban en aquellos tiempos el conocimiento acumulado.


Continuamos con la Casa de Sefarad. Allí conocimos a un auténtico viajero del tiempo, decía ser de tradición judía, nos contó un fantástico cuento del que aprendimos que tiene más importancia el trabajo en equipo que la fuerza o el tamaño. Además nos leyó en ladino un fragmento del Principito.


Por último llegamos a la Mezquita Catedral. Disfrutamos de sus bosques de columnas y arcos, de los contrastes cristianos y árabes, sus grafías, de lo mágico de la luz y el color de sus vidrieras, encontramos la sepultura de Luis de Góngora...






Y ¡cómo no! Una más que merecida parada para compartir lo vivido y recuperar fuerzas.


Un verdadero viaje en el tiempo.


Para los curiosos o los que quieran volver, aquí están los enlaces a las páginas de los sitios que visitamos:
La casa andalusí
La casa de Sefarad
La Mezquita de Córdoba



jueves, 4 de mayo de 2017

¿Cómo actuar cuando un niño convulsiona?


¿Qué son y a qué se deben las convulsiones?

Se trata de la contracción involuntaria y patológica de los músculos, es decir, de movimientos irregulares localizados en un grupo muscular, en varios o bien en todo el cuerpo. Suelen iniciarse de forma súbita y duran poco tiempo (es importante registrar el tiempo que duran).

En niños, con más frecuencia, se deben a subidas de fiebre.

¿Cuáles son los síntomas?

  • Movimientos involuntarios.
  • Rigidez corporal. 
  • A veces van precedidos de cambios de humor, dolor de cabeza, irritabilidad y mirada fija.
  • Desvanecimiento súbito sin causa aparente. 
  • Emisión espontánea de heces u orina. 
  • Salivación excesiva. 
  • Sudoración, náuseas, palidez. 
  • Fiebre (convulsiones febriles). 
  • Músculos flácidos. 
  • Pérdida de consciencia. 
  • Pérdida de memoria transitoria.

¿Qué hacemos ante un niño que convulsiona?
  • Tumbarle de lado a ser posible y evitar que pueda hacerse daño. 
  • Actuar con tranquilidad.
  • Comprobar que respira adecuadamente, sin introducir ningún objeto.
  • Aflojarle la ropa y retirar cualquier objeto de su cuello como bufandas o pañuelos.
  • Si tiene fiebre, intentar bajarla quitándole la ropa.
  • No dejarle solo en ningún momento.
  • Contar el tiempo que dura la convulsión.
  • Si es la primera vez, llamar al 112.
  • Si no es la primera vez, y su pediatra se lo ha aconsejado, adminístrele el medicamento prescrito, tal como se muestra en el tutorial:

jueves, 20 de abril de 2017

Celebramos la Semana Santa


La Procesión de la Guarde

Hoy hemos compartido la Semana Santa con la procesión con la que todos los años festejamos estas fechas. Como es de costumbre, salimos de la Escuela con nuestras cuadrillas de costaleros cargando el Santo Cristo y con las mantillas encabezando el paso mientras portaban nuestro estandarte. Fue emotivo para todos verles entrar en la Iglesia con el paso y de rodillas, al son de la música. Padres, madres, abuelos, abuelas... y un sinfín de familiares acompañaron a los peques de los caracoles, los gatos y los ratones en todo el recorrido. Manolo, nuestro querido sacerdote, recibió la procesión y compartió unas palabras con todos nosotros. Después Moisés nos regaló una saeta con la que amenizar el momento. Ya de vuelta, contentos y emocionados, regresamos a la Escuela con el es
píritu colmado de magníficas experiencias.

Y algunas fotos más de los protagonistas...





Gracias a todos los que hacéis posible momentos tan especiales de vivir y magníficos recuerdos para mañana.